Diputado Víctor Hernández Cerdas, La punta del Iceberg de la violencia patrimonial feminista

Los diputados son los culpables de que las mujeres amenacen a los hombres con abusar de la ley.

“Si no haces tal cosa, entonces te voy a acusar de violencia doméstica y te echo de patitas en la calle”

Hasta ahora, nada ni nadie puede impedirles a las mujeres abusar de una ley que es abusiva desde su concepción.

Si calumniar a su pareja tuviera consecuencias para cualquiera de las dos partes, entonces muchas de las parejas separadas habrían resuelto sus asuntos de otro modo con el beneficio para sus hijos. Pero por ahora lo más fácil es acusar al marido de cualquier cosa, echarlo de la casa, quitarle la propiedad y meterle una pensión. Esas acciones, sólo traen incentivos para las mujeres y pérdidas terribles para los hombres.

Siempre hemos dicho que cuando una parte solicite medidas de protección, que cualquiera de los conyugues debería de poder solicitar la separación o divorcio junto con el remate de las propiedades y la división de los bienes gananciales y que esto se ejecute a lo sumo 6 meses después de la separación fisica, o sea al concluirse los primeros 6 meses de medida cautelar o de protección.

¿Haría usted negocios con un socio en donde usted es el que debe de construir la propiedad (su socio puede ayudarte en forma solidaria) pero si su socio lo desea puede expulsarlo en cualquier momento y quedarse con el negocio y además una pensión?  Luego, si te queda suficiente dinero para contratar un abogado cabe la remota posibilidad de recuperar algo de su inversión después de 7 años de pagar abogados. Y lo mejor de todo, al final solo tú pierdes porque ese socio nunca estaría fuera del negocio, ni siquiera necesita pagar un abogado porque el estado lo apoyará en todo el proceso.

Ahora, si usted fuera el socio con tantos beneficios en la sociedad, ¿ no echarías a tu socio con cualquier pretexto?.

Ahora puedes entender porque los jóvenes ya no quieren formar familias y porqué las familias se desintegran hoy en día con ritmo exponencial.

Las medidas de proteccion no deberían de convertirse en una forma segura de decomiso de los bienes del cónyugue masculino ya que nada tiene que ver la proteccion con los bienes.

La división efectiva de los bienes gananciales al cabo de 6 meses, no solo le hace justicia a cualquiera de los conyugues, sino que disminuiría significativamente las denuncias calumniosas por interés. Además les daría a las mujeres suficiente tiempo para planear y a los hombres de poder disponer de la mitad de los bienes gananciales para emprender otro rumbo con la dignidad que merece por los años de esfuerzo que le costó acumularlos y evitaría posibles revanchas fatales.

En pocas palabras, justicia pronta.

Cuando iniciamos este blog hace más de 5 años, nadie se imaginaba que en la asamblea legislativa nos tomarían en cuenta algún día, inclusive los mismos hombres sentían pena de protestar por las injusticias escritas en las leyes feministas de este país.

Algo hay en la cultura que hace que los hombres escondan las injusticias que las mujeres cometen con ellos hasta incurrir en el masoquismo. Pero si eres famoso como un diputado, eso puede ser muy difícil porque estás expuesto a llorar en público.

Después de que los diputados empezaron a ser víctimas de sus propias omisiones en la ley y empezaron a sufrir como cualquier hombre mortal, se están dando cuenta de que si no equiparan las leyes por pena al qué dirán,  entonces les dará más pena todavía cuando esas mismas leyes sean usadas en su contra.

Como por ejemplo el diputado del Partido Acción Ciudadana (PAC) Víctor Hernández Cerdas, quien estuvo llorando a llanto pelado por haber sido maltratado por su mujer al no acceder a sus pretensiones de un divorcio por mutuo acuerdo.

Él dice que lo amenazaron con que ella iba a presentar una demanda por violencia doméstica. Y lo hizo, ahora el diputado está en un verdadero problema.

Nos preguntamos si este diputado no desearía que su palabra valiera aunque fuera el 50% de lo que vale la palabra de su ex mujer. Pueden ver el caso en La nación  Aqui

El diputado Víctor Hernández es uno de los que se agachan cuando hay que ponerse de pie y levantar la vos en la asamblea para que las leyes feministas no atropellen a los hombres.

Por suerte Hernández  puede pagar un abogado con su gran sueldo, algo que la mayoría de los hombres no pueden pagar, pero muy pronto se dará cuenta de que por más dinero que le pague, su abogado podrá hacer muy poco para protegerlo de cualquier calumnia, para que los hombres puedan defenderse de las calumnias los diputados deben de darles ese beneficio en la ley. En vez de darles a los hombres la posibilidad de defenderse, los diputados legislaron para quitarles la posibilidad más remota.

Casos como el del diputado son típicos casos de burro amarrado contra tigre suelto con nuestras leyes que ampliamente favorecen a un género (femenino) sobre el otro (masculino).

Por cierto, las damas no necesitan pagar un abogado porque tienen al INAMU,  a la defensoría de los habitantes, los asesores del juzgado los cuales redactan sus demandas y las aconsejan mientras están demandando etc. etc. etc.

Señor Víctor Hernández Cerdas, aquí en derechoscr.com, no nos alegramos de que usted tenga problemas familiares, pero los diputados deberían tener cuidado de las leyes que aprueban. Más aún, si ven que una ley está mal entonces deberían de tener la valentía de formular propuestas para enmendarla.

Para que en el futuro usted, su hijo o algún familiar (o incluso alguno de sus electores) pueda defenderse señor diputado.

No es posible que una mujer pueda amenazar con poner una denuncia de violencia doméstica. Una mujer debería poder poner una denuncia de violencia doméstica sólo cuando hubiera sido víctima de tal. Sólo amenaza quien tiene el poder, y los hombres no pueden seguir siendo los ciudadanos bajo amenaza en la familia y con libertad condicional hasta causarle un disgusto a su conyugue.

Las repercusiones para una mujer que recurre a una denuncia falsa deberían de ser duras. Sin embargo no hay castigo para una mujer que incurra en demandas calumniosas por violencia doméstica y por eso puede amenazar con hacerlo. Amenazar coaccionar y chantajear con impunidad y lo peor es que tienen la ventaja de poder cumplir sus amenazas cuando quieran.

Una mujer puede sacar a su compañero de la casa en cuestión de 1 hora, pero a él le tomará 7 años lograr recuperar parte de su patrimonio siempre y cuando disponga del dinero para pagarle a un abogado como el que contrató el diputado.

La violencia doméstica ha pasado a ser un factor atractivo para la mujer, hoy en día, la ruptura de una relación de matrimonio sólo trae beneficios para la mujer y todo lo contrario para el hombre.

Tal es así que el 95% de las parejas que se separan hoy en día tienen una demanda de la mujer por violencia doméstica para aprovecharse de la incapacidad de defensa del hombre y los beneficios que la mujer obtiene de la demanda.

Beneficios inmediatos como alejar al hombre de la casa y los hijos,  minimizarlo, enlodarlo y desprestigiarlo, introducir a otro hombre a la casa, obtener pensiones onerosas y una larga lista de ventajas.

Es muy fácil apropiarse de todos los bienes cuando el conyugue varón es expulsado del hogar y tenga que mantenerse a 500 metros de distancia de ellos.

Ahora, el diputado Hernández, con todo y sus ventajas y abogados caros, siente en carne propia la injusticia de las leyes que los diputados aprueban a favor de las mujeres y en contra de los hombres.